miércoles, 8 de junio de 2016

Pink Floyd - 1967 - The Piper At The Gates Of Dawn

Al principio de los días un hombre empapado en ácido de presencia carismática y excéntrico comportamiento consumido por el LSD, conseguiría con su prosa una extraña mezcolanza compositiva entre la más oscura de las pesadillas y la candidez de juguetonas y humorísticas letras infantiles. Conocido como el logro de oro de Syd Barrett en lo que es la Biblia Astral de la psicodelia británica hoy por fin al fin The Piper At The Gates Of Dawn, primer lanzamiento de Pink Floyd y el que a la postre sería su propio pasaporte a la locura.


Pink Floyd nació en Londres a finales de 1965 después de que Roger Waters, Nick Mason y Rick Wright, con intereses musicales comunes, formaran en un principio Sigma 6. Al poco tiempo reclutarían a un viejo amigo de Waters de sus días en Cambridge, a un joven intrépido dispuesto a comerse el mundo, un tal Syd Barrett. Syd ganó peso rápidamente y bautizó a la banda Pink Floyd Sistem, reduciéndose la coletilla de Sistem poco después. El nombre fue en honor de dos viejos bluesmen: Pink Anderson y Floyd Concil que Barrett sacaría probablemente de su propia colección de discos

Su primer contrato como Pink Floyd sería para ofrecer una serie de actuaciones bautizadas como Spontaneous Underground en el Marquee londinense en febrero del '66, cuando aún estaban en la búsqueda de una identidad sónica. La repercusión de sus shows iba en aumento acrecentando la fama de la banda y más cuando introdujeron el uso de diapositivas a color en un juego de luces conocido como light-shows que dotaba de mayor atractivo la ya de por si sugestiva puesta en escena de unos todavía, eso sí, primitivos Pink Floyd.

El auge de la banda iba en aumento y el primer single era ya una necesidad para una banda que gozaba de una creciente repercusión dentro de la escena londinense. Así, en marzo de 1967 llegaría el que iba a ser su primera publicación, el single Arnold Layne, un pop psicodélico de letra un tanto obscena que pronto encontró la censura en muchas de las emisoras de la época. Pero Pink Floyd ya eran toda una realidad y los conciertos y proyectos se sucedían acrecentando su reputación en vivo gracias a sus actuaciones en lugares tan míticos como el UFO Club o Roadhouse y acallando a esa minoría escandalizada.




Ya bajo el auspicio de un sello como EMI publicarían su primer y único gran éxito con Barrett con el accesible single See Emily Play en pleno Summer Of Love, melódica y ácida con una letra sobre la conocida como colegiala psicodélica, groupie del UFO y que marcaría el principio del fin de un Syd cada vez más desequilibrado por sus adicciones.

Pero necesitaban más y el 5 de agosto saldría al mercado su primer long play The Piper At The Gates Of Dawn con Norman Smith, hombre de la casa de Abbey Road e ingeniero de The Beatles, como productor. La primera edición sería en mono, para disfrutar la versión en stereo habría que esperar hasta septiembre y es que este disco lo pide a gritos basta comprobarlo con 'Astronomy Domine'. El título del LP lo había tomado prestado Syd Barrett del clásico de la literatura infantil de Kenneth Grahame El Viento En Los Sauces, su libro favorito. Grabado a lo largo de casi tres meses en los Abbey Road coincidirían con las sesiones de otro de los grandes elepés de todos los tiempos como el Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club de The Beatles.


Con el liderazgo compositivo de un Syd Barrett inmerso en una vorágine autodestructiva que acabaría por consumir su propia capacidad, en el álbum se atisba un cambio en la dirección musical respecto a sus dos primeros singles de aires más poperos y orientados al sencillo. Canciones pegadizas, melodías psicodélicas de aires pop, toneladas de experimentación y letras infantiles y surrealistas repletas de metáforas sobre odiseas alucinógenas. A todo ello hay que añadir los extraños y distorsionados órganos de Wright, disonancias, ecos, extravagantes ruidos y efectos, aullidos...y todo un sin fin de alteraciones sonoras.

Contraportada con dibujo de Barrett su otra pasión
La cara A se inicia con el apabullante 'Astronomy Domine' abriéndose todo un mundo de sensaciones con la voz del mánager Peter Jenner y esos etéreos efectos marca de la casa. El teclado repetitivo y compulsivo de Wright, el lisérgico solo de Barrett junto a la poderosa y concomitante batería de Mason convierten a 'Astronomy Domine' en una psicodelia espacial que suena tan atemporal como extravagante con su viaje ácido.
Más accesible y bailable llega 'Lucifer Sam' un pop psicodélico en la onda de 'See Emily Play' que demostraba la grandeza de Syd y por la que siempre he mostrado especial predilección.
Con el gusto de Barrett por la literatura infantil nos sumergimos en otro de los clásicos: 'Mathilda Mother' antes de dar paso a ese poema folk experimental llamado 'Flaming'.
Turno para 'Pow R. Toc. H' la que es sin dudas de las mayores excentricidades instrumentales de Pink Floyd. El final desemboca en una frenética y anárquica orgia instrumental.
Y cierra esta primera parte la que sería la única canción en la que las labores compositivas y vocales recaerían en Roger Waters 'Take Up Thy Stethoscope And Walk'. Bastante progresiva y con un teclado psych muy dominante.


Comenzamos la cara B con ni más ni menos que 'Interstellar Overdrive'. Aterradora y desquiciante. 10 minutos instrumentales delirantes de viaje astral. En el camino del rock sinfónico que estaba por venir, los sonidos ambientales y excéntricos derivan en un clímax experimental aterrador. Si lo que pretendes es no conciliar el sueño nada como escuchar 'Interstellar Overdrive' y la oscuridad conseguirá nublar tu calma indefinidamente llevándote a un estado de inquietud permanente. Perturbadora a más no poder.
'The Gnome' es un chiste musicado de divertida letra sobre enanos y ritmo lento folk con Barrett muy, muy relajado.
Vuelta a la oscuridad con la perturbadora 'Chapter 24' a la que se apunta cierta influencia Beatle.
Nos vamos acercando al final con 'Scarecrow' primera canción del álbum publicada ya que se editó como cara B de See Emily Play. Trata sobre el destino y la imposibilidad de escapar de él.
Y cierra el LP 'Bike' de letra infantil y un poco burlona sustentada sobre ritmos cabareteros. Barrett luce vocalmente entre efectos de todo tipo y distorsión con ese final lunático que nos regalan a la altura de un LP donde la psicodelia reina a sus anchas aunque sin tanto colorido como la que se practicaba al otro lado del Atlántico.


The Piper At The Gates Of Dawn gustaría a la crítica recalcando su innovador sonido psych y alcanzando el nº6 en las listas británicas pero también significaría el pasaporte a la locura de un Syd cada vez más desquiciado por los prolongados abusos alucinógenos. Excesos que provocarían la llegada David Gilmour quien había enseñado los primeros acordes a Barrett, como segundo guitarrista, aunque al poco (abril del '68) se le pidió abandonar al grupo desquiciado por su frenopático estado. Pese que llegaría a publicar 2 elepés en solitario (que he aprovechado para escuchar por primera vez con un buen regusto) su salida haría que Pink Floyd tomara nuevos caminos abandonando la psicodelia de los Syd times. Su siguiente álbum, A Soucerful Of Secrets tendría ya una presencia testimonial de Barrett con tan solo 'Jugband Blues' como aportación.

Borrado durante años, con el tiempo The Piper At The Gates Of Dawn acabaría superando el malditismo en el que pareció hundirse y revalorizarse hasta el punto que a día de hoy está considerado entre los mejores discos del rock psicodélico. Incluso para muchos es la gran obra de Pink Floyd, así como el principio y el final. Para mí los Pink Floyd de The Piper At The Gates Of Dawn y la banda mayormente conocida poco o nada tienen que ver, entendiéndose como dos entes totalmente diferenciadas si bien ambas altamente admiradas por quien escribe y que espero poder dar continuidad con alguna de sus millonarias en ventas referencias de los años setenta.


Pink Floyd:

Syd Barrett - Lead Guitar & Vocals
Roger Waters - Bass Guitar & Vocals
Richard Wright - Farfisa Organ, Piano & Vocals
Nick Mason - Drums & Percussion


Track listing:


Side #1:

1. Astronomy Domine
2. Lucifer Sam
3. Matilda Mother
4. Flaming
5. Pow R. Toc H.
6. Take Up Thy Stethoscope And Walk

Side #2:

1. Interstellar Overdrive
2. The Gnome
3. Chapter 24
4. Scarecrow
5. Bike

2 comentarios:

Orlando dijo...

A ver si se ponen las pilas los de M80 , que del Another Brick On The Wall no salen .

David Lynott dijo...

Jajaja no pides tú nada. Yo hace tiempo que perdí la esperanza en según que emisoras. Menos mal que nos queda algo de radio 3.

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